[Jueves 15 de noviembre, 2018] ELE PRESENTA SU NUEVO TRABAJO EN EL TEATRO CASYC UP. SOUL, GOSPEL Y RHYTHM AND BLUES DIRECTO AL CORAZÓN


ELE irrumpió en la escena soul de nuestro país atrayendo todas las miradas con Sumer Rain (Arcadia Music). En poco tiempo fue bautizada como "la gran esperanza del soul" y "la apuesta de futuro 2015" por Rolling Stone, Talento Fnac, primera española artista oficial de una Final Four, y representante española en el Festival SWSX de Austin (Texas), donde cosechó una cerrada ovación tras su actuación en 2016.
Por la nostalgia y la melancolía que derrocha, por su potencia lírica y por el optimismo que inyecta, ELE es una experiencia única, inigualable y, sobre todo, inolvidable. Melodías delicadas y a la vez desgarradoras con letras que disparan al corazón. Soul con puertas abiertas al pop y guitarras americanas. Coros góspel que cortan la respiración y que son pieza clave en sus directos.
Detrás de ELE se encuentra la compositora, pianista y cantante Elena Iturrieta. Junto a ella, en directo, su inseparable coro de gospel: Laura Bartolomé y Harry Bloom. Junto a ellos, músicos de primer nivel como Manuel Castro (bajo/contrabajo), Amable Rodriguez (guitarra eléctrica y acústica), Chiloe (batería) y David Shulthess (hammond y teclados).


El pasado mes de abril vió la luz su esperado nuevo álbum: What Night Hides (Arcadia Music), grabado en el mítico estudio 2 de Abbey Road de Londres y de nuevo con Pablo Cebrián a la producción. Recorrer los caminos a los que nos lleva What Night Hides es una experiencia hipnótica, intensa y repleta de matices e imágenes. La elegancia del sonido, la sutileza de los arreglos y la variedad de registros lo han confirmado como uno de los trabajos más potentes de los últimos tiempos. Su escucha es inmensamente placentera, un hermoso regalo a los amantes de la música donde el soul manda en todo momento.
En su anterior trabajo, Summer Rain, ELE apostaba por la cara más alternativa del rhythm and blues contemporáneo. Un tratado de folk con alma que bordó desde la primera nota de "Am I Wasting My Time?", punto de partida del disco y donde dejaba patente su gusto por emblemas como Dylan y Springsteen. Un trabajo de carácter urbanita y cotidiano, de sonidos atemporales e imperecederos que aún crece con cada escucha. Canciones de toda una vida que han nacido para perdurar y no pasar de puntillas. Desde su abrumador debut se sabía que lo de ELE era tan sólo cuestión de tiempo y su momento ha llegado.


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